martes, 2 de enero de 2018

La desgracia del toro

El toro se ha visto obligado a completar un ciclo desafortunado. Nace, crece, se alimenta y termina muriendo en medio de un ruedo. El toro no ha elegido cómo morir. Sufre la decadencia de valor y compasión del humano. Mira como toda una masa de gente se reúne para verlo correr en círculos y tratar de escapar corneando todo lo que se le interponga. El toro espera su muerte con lentitud.

Mosaik, B. Sandoz.
Los toreros son los héroes del lugar. Aquellos y aquellas que tienen el derecho de matar sólo por su experiencia o herencia familiar. Si uno, como persona común, se atreve a ir a un establo y mata a un toro estará condenado a ser llamado un asesino. Nosotros, los no-aptos para vestir con leggins bordados en oro y usar ridículos sombreros, podemos ser una de dos cosas: espectadores taurinos o personas pensantes. Los espectadores se valen de la moda, la cultura y de un gusto al arte. Es sensato el valor inexistente de esas cosas. Los hombres y mujeres que dicen apreciar la valentía del torero y sus cómplices demuestran una ignorancia especial. Se emocionan al ver entrar al toro y le aplauden diciendo “ole” cuando este ha dado un buen espectáculo. Los demás, seres con materia gris, reprenden todos estos actos. 

Al toro lo han sentenciado con pena de muerte. Lo maltratarán y lo torturarán hasta que no tenga fuerzas para avanzar. Finalmente, el “héroe del ruedo” toma un arma blanca y la usa para atravesar el cuerpo del toro con la excusa de que así morirá con rapidez. Por otro lado, el toro sufre de una tremenda culpa cuando usa sus cuernos contra su verdugo y lo deja malherido, o en el peor de los casos, lo mata. La gente corre al auxilio del humano y desprecia al animal. Esa es la desgracia del toro.

Caballos son también utilizados en las corridas de toros.
La corrida de toros es declarada como Bien de Interés Cultural y Patrimonio Cultural Inmaterial en España. Esto deja en claro la burla hacia nuestra inteligencia. El toro no ha nacido para entretener y esto se nota en la cantidad de gente que ha comprendido que un animal no es objeto de placer. Porque al final, una persona devota de los toros pagará su entrada para sentarse a presenciar los últimos minutos del pobre animal. Quisiera que alguien me explicase los motivos del porqué una persona debería asistir a una corrida de toros. ¿Es quizá una parafilia? ¿Ver sangre correr les excita?
    Y por si no fuera suficiente, se han creado más festivales de la crueldad. Como el llamado "torneo del toro de vega" en el cual se deja libre a un toro y hombres montados en caballos lo cazan con lanzas como si se tratase de una representación de la era de piedra. El toro sufre de nuevo. 
    Otra "fiesta" no menos bárbara es la denominada "toro de San Juan" en donde un toro se deja en libertad para ser literalmente el blanco de la gente. Los participantes lanzan docenas de dardos al toro para que al final este sea derrotado de un disparo. Lo más triste de todo es que esta actividad es declarada como bien de interés turístico
Toro de San Juan, público.es
La tauromaquia o cualquier actividad que involucrae maltratar a un ser vivo no es un arte.  No es entretenimiento, deporte, ni mucho menos un acto cultural. No hay manera lógica o humanitaria para defender estas prácticas. Exhibir animales y matarlos es en pocas palabras una situación de salvajismo humano.

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